¿MERECE LA PENA HACERSE UNA ENDODONCIA?

A) Infografía Explicativa. Fuente: web de AEDE.

B) ANTES. Caso de endodoncia de molar, técnicamente complicada (conductos muy finos de paciente bruxista).

C) DESPUÉS: En el control a 2 años, con su endocorona cerámica, clave en la protección y pronóstico a largo plazo de estos casos.

Hoy en día disfrutamos de muchos avances en tecnología y técnicas para el diagnóstico cada vez más preciso y para la realización del tratamiento, como por ejemplo la imagen 3D de un CBCT (scanner dental de tamaño reducido) o los instrumentos rotatorios que permiten limpiar piezas complejas en menos tiempo.

¿DUELE HACERSE UNA ENDODONCIA?

No. En la mayoría de los casos, es un procedimiento indoloro por el uso de la anestesia y la mejora del diagnóstico para saber cómo abordar el tratamiento. Sólo molesta en casos de inflamación aguda excepcional.

¿ES VERDAD QUE MUCHAS ENDODONCIAS FRACASAN?

No. Un buen tratamiento realizado por profesionales formados y con experiencia (Endodoncistas), tiene una tasa de éxito mayor al 95 %.

Influyen las condiciones previas al diente, la anatomía o forma que tiene el sistema de conductos. También es muy importante que si la pieza dental presenta una gran destrucción de su estructura antes de la endodoncia, luego se realice un tratamiento adecuado que pueda proteger la estructura restante para que pueda soportar las fuerzas de la masticación (por ejemplo Coronas o Incrustaciones), ya que no todos los materiales de restauración aseguran la protección del diente endodonciado.

Finalmente, como todo tratamiento dental, requiere controles para ver la evolución, sobre todo en casos con antecedentes de infección en el hueso.

Estos controles deben de realizarse cada 3-6 meses, dependiendo de si existe o no lesión previa a la endodoncia.

Y nunca hemos de olvidar, que sin una buena pauta de higiene, no podemos proteger nuestra salud oral (y general).

ENDODONCIA VS. IMPLANTE

Hemos evolucionado desde hace 15 años, cuando era mucho más fácil plantearse la extracción de una pieza y ponerse un implante. A día de hoy, sabemos de los implantes no son una solución mágica y también presentan problemas. Lo más nuevo parece volver a lo antiguo, y promover, en todo caso, una odontología conservadora. La pieza dentaria es la que mejor conserva el hueso, siempre que se pueda mantener. Las técnicas han avanzado para poder salvar esas piezas y rescatar casos más extremos.

En caso de pérdida de una pieza dental, por pronóstico imposible, existen diversos tratamientos para favorecer la regeneración ósea, pero éste debiera de ser el último escalón. El diente no es algo externo, no es un coche, o una lavadora, sobre los que valoramos el coste de la reparación y la adquisición de uno nuevo. 

El coste económico de mantener la propia pieza suele suponer aproximadamente la mitad del correlativo a un implante con su corona, calculando la protección que debamos ofrecer al diente, como por ejemplo una corona o una incrustación de cerámica. Siempre que se pueda, la endodoncia debe ser la opción elegida, ya que preservamos la salud del paciente, manteniendo su correcta función masticatoria.

¿Merece la pena hacerse una endodoncia?. La respuesta es clara. Si existen las condiciones, que deberá determinar su dentista de confianza, sí, sin duda.

Dra. Gabriela Campos Caro